La pozoalbense, África Villén, expone sus "Sueños" en el Palacio de la Merced

La Sala de La Arpillera del Palacio de la Merced, sede de la Diputación de Córdoba, acoge desde este miércoles y hasta el próximo 27 de octubre, la exposición fotográfica de la joven artista conceptual, África Villén, bajo el título ’Sueños’.

Villén, que agradeció el apoyo de la institución provincial, ha destacado que se trata de una serie de imágenes que recogen un importante trabajo de campo, “en las que he querido representar algunos de los sueños más comunes y habituales a los que todas las personas nos podemos enfrentar cada día”. 

Características como la oscuridad, el misterio y las intensas emociones que todas las personas han podido tener alguna vez en su vida, es lo que hace que la muestra se convierta en un auténtico viaje que hará el deleite de todos. El color, la composición y las texturas empleadas se mezclan con los sentimientos que esta autora conceptual ha querido transmitir a través de sus obras basadas en parte en el autorretrato. Una obra, que en ocasiones, según señala la artista “se muestra con una clara estética cinematográfica debido al uso de los tonos, de la iluminación y de la propia puesta en escena”.

África Villén nació en 1990. Desde muy pequeña ya se interesaba por las diferentes vertientes del mundo del arte. El teatro, la pintura, la danza o la poesía eran sus pasiones, pero no fue hasta su mayoría de edad cuando comenzó a descubrir el mundo audiovisual. Un mundo que le fascinó y que hizo que dirigiera sus estudios en este sentido.

Así, esta polifacética artista fue tomando parte en diferentes trabajos cinematográficos y en televisión, una experiencia que le obligó a adentrarse en el mundo de la fotografía reflejada ampliamente en la provincia de Córdoba y en parte de Andalucía. Fue al cumplir sus 21 años, cuando se interesó con un estilo de fotografía diferente, donde expresar y afianzar su estilo; descubriendo y estudiando a los más prestigiosos fotógrafos nacionales e internacionales se desmarcó hacia un estilo propio donde el color y la fantasía se convertían en los auténticos protagonistas de su excelente trabajo.