Los trabajadores de planta de Granitos de Los Pedroches (Grapesa)
en Pozoblanco han realizado hoy una huelga ante los salarios que les adeuda la
empresa, en concreto 4 meses y atrasos del año 2009, lo que supone entre 10.000
y 11.000 euros por trabajador. Los impagos también los sufren los comerciales y los administrativos si bien ellos no han participado en la huelga.
Miguel Cobos, portavoz de los trabajadores, ha
señalado hoy que cuando anunciaron al gerente que iban a realizar la huelga, éste les anunció que cerraba la empresa, que iba a entrar en liquidación, que ellos se
iban a la calle y que se haría cargo la Administración concursal de las deudas que existan.
Miguel Cobos relata que el gerente les dijo que el dinero
de las últimas transacciones se iban a destinar a pagar a los abogados. Los
trabajadores han recordado que la empresa ya intentó realizar un ERE cuando
planteó hace un tiempo un concurso de acreedores “pero la situación de la
empresa no era tan mala” y añade que “luego la empresa dejó de comprar bloques
y ese ha sido el principio de su fin”.
Además, ha criticado algunas decisiones tomadas por
la empresa como llevarse la producción a Cáceres y poner en marcha en Ruanes (Cáceres) una planta que nunca ha sido rentable. Por cierto, que también sus compañeros de Ruanes están hoy en huelga.
Sobre el gerente, Javier Gaztelu, el portavoz de los trabajadores ha manifestado que llegó como gerente y terminó como accionista para entrar en el consejo.
Sobre el gerente, Javier Gaztelu, el portavoz de los trabajadores ha manifestado que llegó como gerente y terminó como accionista para entrar en el consejo.
LA
VERSIÓN DE LA EMPRESA
Por su parte, Javier Gaztelu, ha negado que los
ingresos que vayan llegando vayan a ser para abogados y asegura que serán para
los trabajadores.
Gaztelu ha asegurado, en Cope Pozoblanco, que iba a intentar hablar con los trabajadores “para convencerlos de que trabajen y al menos salga lo que ya está fabricado y así se obtenga liquidez” y añade que son algo más de dos salarios lo que se les adeuda.
Gaztelu ha asegurado, en Cope Pozoblanco, que iba a intentar hablar con los trabajadores “para convencerlos de que trabajen y al menos salga lo que ya está fabricado y así se obtenga liquidez” y añade que son algo más de dos salarios lo que se les adeuda.
El gerente dice que ha cerrado el 70% del sector en
España y que Grapesa era la única empresa que hasta ahora había aguantado fuera
de Andalucía. Ahora llega también su final.
DENUNCIA
POR SABOTAJE POR LAS GRÚAS
La situación está complicada ya que Javier Gaztelu
ha denunciado ante la Guardia Civil que se han manipulado los contactos
eléctricos de las grúas y que no saben dónde están los mandos a distancia.
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