La procesión motorizada en honor a San Cristóbal, patrón de los conductores, reunió este sábado a un buen número de motos, quads, coches, furgonetas, autobuses y camiones que recorrieron numerosas calles de todas las barriadas de la ciudad, haciendo sonar sus bocinas. Antes, el sacerdote, Anibal Miller Cantero, ofició la misa encima de un camión colocado en la puerta de la parroquia de San Bartolomé y con agua bendecida tuvo la ocasión de bendecir los vehículos de todos los participantes. La imagen de San Cristóbal fue procesionada como es costumbre encima de un coche descapotable. Este año se estrenaba Pedro Garrido como presidente de la Cofradía. A la procesión acudió la concejala, Paqui Fernández, en representación del Ayuntamiento.
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