Han pasado 25 años de aquella primera Muestra de Música Tradicional y se nota. Aquellos jovencitos que pusieron los cimientos de esta cita anual con la música de raíz ya peinan canas. Los artistas nunca vistos por estos lares como La Carraca, Nuevo Mester de Juglaría o Mayalde; los escenarios de la Plaza de Toros, el Parque Aurelio Teno o la terraza de cualquier bar a la hora de la aparcería; los gaiteros recorriendo en 1988 la calle Mayor casi a oscuras por una avería en el transformador de Pecuarias, el reparto de gazpacho, tostaos, dulces elaborados por los vecinos o altramuces en unas muestras que reunían a más de 3.000 espectadores en la plaza de toros, el esfuerzo de Sonido Caseauto por adquirir sus nuevos equipos cada vez que llegaba la muestra, las ansias por incorporar a los niños y a los jóvenes....
Sí, el tiempo ha pasado pero gracias al compromiso de Aliara, a los componentes que comenzaron esta historia, a los que alguna vez estuvieron y a los que lo son, la muestra -ahora festival Folkpozoblanco- goza de buena salud. Acaba de terminar la edición del 2013 y lo hemos visto en la calle, en El Silo y en La Salchi.
El patio de La Salchi, cuyo candado rompería -metafóricamente- Aliara un 24 de julio del 2010 para recuperar para la ciudad este antiguo matadero como espacio cultural, se llenó el pasado jueves de niños y mayores para ver y oír a "Trencaclosques", que según nos explicaron en la radio significa en castellano "rompecabezas".
El viernes, tras el pasacalles de la banda vallisoletana "La Parrús Dixie Band" que con su música alegre animó la noche, y antes del espectacular concierto de los hispano checos "Street Wings", con su marcha celta y country, más de 600 espectadores abonaron su entrada para disfrutar de "Los Sabandeños". Fue un concierto memorable y para la historia, como también lo fue el de "Luar Na Lubre" el 28 de junio.
Los 40 componentes de "Los Sabandeños", guiados por Benito Moreno y sobre todo por el veterano Elfidio Alonso, sorprendieron por su magnífico estado de forma. Llevan 50 años de trayectoria y hay muchos cantantes y músicos nuevos. Todos a la par y con muchas ganas de agradar al público, ofrecieron durante dos horas un repaso por la música tradicional canaria, pero también sonó algún bolero y alguna ranchera, el famoso pasodoble Islas Canarias, alguna malagueña de Lanzarote y hasta versiones de canciones pop. Geniales y un público entregado y que a la salida no ocultaba su emoción. Me quedo con el gesto de Elfidio Alonso de incorporarse de la silla que le pusieron cada vez que tenía que presentar o cantar. Por cierto, que arrastraron a Pozoblanco a seguidores de distintas provincias.
Y luego el sábado, "Aliara". También estuvieron el grupo de "Danzas Marquesa de Benamejí" que bailó algunas jotas de Aliara, "Vigüela" de Toledo con la música folk de Castilla La Mancha, Jaime Lafuente que cantó con Aliara dos temas, Sabino Moreno que presentó y Sebastián Fernández que coordinó.
Pero fue Aliara y sus siete componentes sobre el escenario en la pared del fondo de La Salchi los que, una año más, hicieron vibrar al público desde la primera y hasta la última, que por cierto fue la Jota de Pozoblanco.
El patio del recinto lleno, el bar con los "Alibarra" también y hasta espectadores siguiendo el concierto de hora y media detrás de la verja de La Salchi, ayudados por la gran pantalla lateral para no perder detalle, porque dentro no cogía más gente, ni sentados ni de pie.
José María Sánchez decía al final "hasta siempre" y añadía inmediatamente "hasta el año que viene".
A.M.C.
Aliara con los bailes del grupo de Benamejí:
José María Sánchez, cantando y con el acordeón o con la guitarra:
Doroteo Amor, con la flauta:
Los Sabandeños, el viernes en el Teatro El Silo:
Parte del grupo canario en los camerinos de El Silo:
El espectáculo de Trencaclosques, el jueves:
Emitiendo un programa especial, en directo, desde el punto de encuentro del Folkpozoblanco 2013, en el antiguo Ayuntamiento:
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