La jornada del Jueves Santo tiene marcado carácter salesiano y empieza muy pronto porque son muchos los cofrades y antiguos alumnos que se pasan por la mañana por la Iglesia de María Auxiliadora para ver los dos pasos ya montados. Al mediodía llega el momento de tomar algún refrigerio en el salón Don Eusebio Andújar, aunque hay que marcharse pronto porque a las 20.00 horas está en la calle la Cruz de Guía.
A esa hora de la tarde ya eran muchísimas las personas que aguardaban la salida en la Plaza donde el ambiente era extraordinario. Supone un momento espectacular presenciar la salida del paso del Cristo del Perdón y del palio de la Amargura que atraviesa la puerta muy ajustados y tienen que realizar el giro sobre la plataforma para pisar adoquín.
El Cristo del Perdón con la banda que lleva su nombre y detrás de la Amargura la banda Maestro Amador de Andújar.
Y las nazarenas y los nazarenos parte clave de todo cortejo procesional, y quizá la más importante junto con los Titulares, tienen en esta Cofradía elementos característicos como la peina y mantilla española negra en las nazarenas y la Cruz de Malta en el hábito de los nazarenos.
La estación de penitencia se realizó a buen ritmo en una tarde noche de nuevo con temperaturas primaverales.
No faltaron las referencias al 75 aniversario que celebra la Cofradía si bien la junta de gobierno quiso que la estación de penitencia tuviera su propio sentido y optó por dejar los aspectos conmemorativos para la salida extraordinaria que ya prepara para el 10 de junio. Eso sí, hubo algunos detalles como el pergamino que fue entregado en el palquillo de entrada para pedir la venia o el que recibió en el palco de autoridades el presidente de la Agrupación de Cofradías, Isaías Plazuelo, haciendo constar la Cofradía sus 75 años de compromiso con la Semana Santa pozoalbense.
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